Los primeros relatos sobre los orígenes del surf van desde África a Sudamérica, pasando por Polinesia. Por otro lado, es innegable que Hawái ha desempeñado un papel muy importante en la historia, el desarrollo y la expansión de este deporte.
La cuestión es que el surf en Hawái respresenta más que un deporte. Antes de que se popularizara, los hawaianos ya surfeaban las olas. El surf, cuyas historias y tradiciones se transmitían de generación en generación, era parte fundamental de una cultura en pleno apogeo. El surf estaba dirigido a todos los sectores de la sociedad y representaba un vehículo para la comunidad, la identidad y el sentimiento de pertenencia.